Evaluación por competencias
Los tiempos han cambiado. El salto del siglo XX al XXI ha comportado una serie de avances y transformaciones, que no sólo han afectado al área tecnológica y social, sino también en cómo percibimos la gestión y atracción del talento.
En el ámbito de los recursos humanos ese cambio se traduce en una filosofía de actuación diferente, en cambiar el enfoque, pasar de un concepto tradicional a un concepto más moderno, de un concepto de número a un concepto de persona, con la debida consecuencia de que todo esto ha revolucionado las maneras en las que se desarrollan los diferentes procesos y técnicas empleadas.
Uno de los procesos que ha mostrado una enorme evolución es la gestión y atracción del talento y, por tanto, las técnicas que se emplean en este proceso también se han perfeccionado. En este sentido, la evaluación por competencias se ha implantado como técnica innovadora y de enorme utilidad puesto que proporciona amplios conocimientos acerca de los trabajadores/as.
¿Qué es la evaluación por competencias y por qué es importante?
La evaluación por competencias es un modelo que consiste en situar al trabajador dentro del contexto de la empresa, para ello se tienen en cuenta todos los factores tanto internos como externos para lograr el desarrollo eficaz de las tareas establecidas. Para que quede más claro , veamos un ejemplo: un customer service no solamente debe saber idiomas sino también resolución de incidencias, alta tolerancia a la presión y empatía. La evaluación por competencias, se encarga de despejar esas otras cualidades, que se denominan competencias transversales.
La importancia que tiene este nuevo enfoque para las empresas es vital ya que implementa profesionales polivalentes. Lo que conseguimos al definir de manera más concreta los perfiles y contexto necesarios a cubrir, es tener más porcentaje de eficiencia en la selección y, por tanto, mayor certeza de que el candidato tendrá una buena predicción de comportamiento dentro de la empresa.
Premisas básicas: la metáfora del árbol
Ahora la pregunta es cómo en una evaluación por competencias podemos evaluar esas competencias. Para ello nos puede servir de utilidad imaginarnos a la persona como si fuera un árbol. Las ramas del árbol serían los comportamientos, lo que se ve de las personas, y las raíces serían las competencias, lo no visible.
Por ejemplo si la competencia que requerimos es trabajo en equipo, nos deberemos fijar en esos comportamientos que son reflejo de lo que estamos buscando, para el caso de trabajo en equipo nos podemos fijar en: si la persona que estamos seleccionando participa activamente con otras en la realización de una tarea conjunta, ofrece apoyo en la realización de una tarea a sus compañeros, etc.
Es a través de esta idea por la que podemos indagar en esas cualidades, ya definidas, que harán que la persona se adecue al máximo a su puesto de trabajo y por tanto que nuestra selección ha sido la correcta.
Desde Trivière Partners podemos desarrollar el modelo de evaluación por competencias en tu organización.
Por: Adriana Roselló